Balbín pide informes por el brote de triquinosis en la Provincia

El diputado provincial consideró que “las acciones de prevención y control son sumamente necesarias y son una atribución indelegable del estado, en este caso del gobierno de Axel Kicillof”.

A partir de la evolución de los casos de triquinosis que han sucedido en la provincia de Buenos Aires, junto con las alertas epidemiológicas emitidas por las autoridades provinciales tras la detección de casos sospechosos surgidos en distintos distritos del interior bonaerense, el diputado provincial de Juntos, Emiliano Balbín, ingresó un pedido de informes para que la Provincia detalle minuciosamente sobre esta preocupante situación.

De acuerdo con el informe epidemiológico número 34  del Ministerio de Salud provincial, hasta el mes de agosto se denunciaron 516 casos sospechosos de triquinosis, los cuales sucedieron en los municipios de Chivilcoy, Coronel Dorrego, Ayacucho, Las Flores, Adolfo Alsina, Bahía Blanca, Coronel Suárez, Guaminí, Púan, Saavedra, Hipólito Irigoyen, Rivadavia, Salliqueló y Olavarría, sumando 14 los distritos afectados sobre 135 que posee la Provincia (lo que representa el 10,4% del total).

“La triquinosis tiene como principal fuente de infección para el ser humano el consumo de cerdo doméstico en forma de chacinados crudos o carne mal cocida, aunque también existen otras, como el jabalí u otras especies. Esta situación endémica se produce por deficientes condiciones sanitarias de crianza y ausencia de controles en la producción, faena, elaboración y/o comercialización de carne o productos derivados no cocinados, por lo que las acciones de prevención y control se hacen sumamente necesarias y son un poder indelegable del estado”, fundamentó Balbín en su proyecto.

Y señaló: “La presentación de este pedido de informes es indispensable para que todos los y las bonaerenses podamos comprender acabadamente como se administró la situación de la triquinosis en la Provincia, y con qué criterios se abordó la epidemia”.

Entre los pedidos solicita informar la situación epidemiológica, así como la evolución de la enfermedad durante los últimos 10 años, en cantidad de focos (en animales y humanos) que hayan sucedido, así como enumerar detalladamente las acciones de prevención, tanto para el sector agropecuario como de salud humana.