Perpetua para tres policías por el crimen de Lucas González

El Tribunal Oral Criminal 25 porteño condenó a  Gabriel Alejandro Isassi, Fabián Andrés López y Juan José Nieva, por el homicidio del joven de 17 años asesinado en noviembre de 2021. Los jueces también dieron a conocer la pena contra los otros 11 imputados en el caso. También se investigará al comisario general Gabriel Berard y Oscar Cejas, jefe y subjefe de la Policía de la Ciudad.

El Tribunal Oral Criminal 25 porteño condenó a prisión perpetua a Gabriel Alejandro Isassi, Fabián Andrés López y Juan José Nieva por el crimen de Lucas González, el joven de 17 años asesinado en noviembre de 2021.

Cerca de las 11 de ayer los acusados por encubrimiento dieron sus últimas palabras y se desligaron del crimen.

Aun así, dos horas después los jueces Ana Dieta de Herrero, Daniel Navarro y Marcelo Bartumeu Romero, dictaminaron la pena máxima a los tres Policías de la Ciudad por los delitos de ”homicidio cuádruplemente agravado por haberse cometido con alevosía, placer y odio racial con el concurso premeditado de dos o más personas, abusando de su función o cargo por ser miembro de una fuerza policial”, en referencia a Lucas, y también están acusados de ”tentativa de homicidio agravado”, en el caso de Julián Salas (19), Joaquín Zúñiga (18) y Niven Huanca (19), los amigos del fallecido.


Los jueces también dieron a conocer la pena contra los otros 11 imputados en el caso. En este sentido, condenaron a 6 años de prisión e inhabilitación por 10 años por el delito de encubrimiento a Roberto Orlando Inca.

La misma sentencia de 6 años de prisión e inhabilitación por 10 años fueron para Juan Horacio Romero, Fabián Alberto Du Santos y Rodolfo Alejando Ozán.

Con respecto a Héctor Claudio Cuevas el Tribunal anunció que fue condenado a 4 años de prisión e inhabilitación por 10 años por encubrir y alterar las pruebas.

Sebastián Jorge Baidón fue encontrado culpable de ser autor de las torturas a los amigos de Lucas. Ante esta resolución se le concedió la pena de 8 años de prisión e inhabilitación absoluta y perpetua para ejercer cargos públicos. 

La cúpula policial

Por otra parte, el tribunal pidió que además se extraigan testimonios para que se investigue la actuación en el marco del caso que tuvieron el jefe y el subjefe de la Policía de la Ciudad.

“Se ordena extraer testimonios respecto del jefe y subjefe de la Policía de la Ciudad a raíz de los hechos denunciados por (el imputado) Ángel Darío Arévalos en sus últimas palabras y remitirlos al juzgado en lo Criminal y Correccional número 7, donde quedó radicada la denuncia de la doctora Natalia Paola Arévalos durante los alegatos”, señaló el Tribunal Oral en lo Criminal 25 en uno de los puntos del veredicto que fue leído este mediodía.

El 26 de junio pasado, la abogada Natalia Arévalo, codefensora y hermana del imputado por el encubrimiento Ángel Darío Arévalo, apuntó en su alegato contra la cúpula de la Policía porteña, el comisario general Gabriel Berard y Oscar Cejas.

“La madre de Lucas merece saber la verdad, quienes son los verdaderos encubridores de esto, (los culpables) no son los de menor jerarquía, sino que viene de más arriba”, dijo la letrada, quien visiblemente conmocionada en varios momentos de su alegato, recordó que tras el arresto de su hermano intentó muchas veces contactarse con las autoridades de la Policía de la Ciudad, lo que pudo concretar el 23 de febrero de 2022, a más de dos meses de la detención.

“Pensábamos que nos iban a dar una respuesta y la verdad que nos encontramos con lo peor que le pueden decir a una familia en ese momento, ya que el jefe de Policía y el subjefe nos dijeron algo que no puedo olvidar, que no puedo sacar de mi mente: ‘Nosotros sabemos que sus familiares son inocentes, pero no podemos hacer nada porque esto es un tema político y no queremos que llegue a nosotros’“, relató.

Y agregó: “Le respondí: ‘si ustedes me afirman que mi hermano es inocente es porque saben quién es responsable’, a lo que se miraron y no dijeron nada. Yo ahí entendí que no teníamos en quién confiar”.

“Es muy difícil para mí alegar porque se trata de mi hermano y este es un caso aberrante. Lo tenía que contar porque la verdad se tiene que saber”, dijo para finalizar y darle paso a su socio, Ramón Salto, quien solicitó que Arévalos sea absuelto ya que consideró que “nunca encubrió” y que solo recibió la orden de Cuevas de perimetrar la zona.